1.3.13

Solo, con mi bollo // Single and ready for a Pringle

Comer es un placer

Vamos, quién no se ha quedado tirado más de una vez un viernes o sábado?
Quién no ha pensado que sus amigos eran unos desgraciados?
Quién no se ha sentido la persona más desdichada del mundo y le han dado ganas de espachurrar botellas de champán en el suelo como la loca del coño de Azealia Banks?

Bueno, caris, pues así estamos, solicos y con la nevera llena de comida, y estamos a punto de meter la cabeza en el cazo de sopa que ha sobrado de este mediodía y pagar nuestras penas con la droga de los desgracios, la comida. Gracias a Dios, que la glotonería figura como uno de los pecados capitales y por lo menos somos unos pecadores -Yeah baby, soy un perdedor de mierda pero al menos le llevo la contraria  a la Santa Iglesia Católica!- Penoso...

Si fuesemos unos yonkis, al menos, nos meteríamos un chute de algo, pero como somos patéticos solo podemos permitirnos los vicios de los pobres, el sexo (cuando cae y hay suerte) y la comida; literalmente como los cerdos.

Recordáis ese momento en el que Bridget Jones se pone fina comiendo helado de chocolate frente el televisor, para ahogar las penas tras una ruptura? Aunque no sea por una ruptura, si no por ser los apestados entre nuestras amistades nos disponemos a ponernos como Christina Aguilera, al son de música de mierda.

Que te peten sábado!
Que os peten gente!
Me voy a poner como estas guarras...


Loro